jueves, 16 de enero de 2014
¡CERVEZA PARA TODOS!
Los catalanes, ya han pedido permiso para celebrar su referéndum y siguen liando la madeja. Yo pienso, que esto debería ser, como el que entra en el bar y pide ¡cerveza para todos!. el dueño del bar, no quiere perder la ocasión de hacer negocio, pero no tiene claro luego quien va a pagar las consumiciónes y con toda su simpatía, se dirige al parroquiano que tan espléndidamente ha invitado a sus clientes y le pide, que antes de empezar a servir y por favor, le pague las consumiciónes.
Como en este asunto, se ha puesto en el olvido a la Constitución y todo lo en ella escrito, pienso que se podría dar gusto a todos los catalanes y además quedar bien con todo el mundo.
Si la Constitución habla de un número de firmas que llevar al Congreso y los gobernantes catalanes, quieren pasar por alto esta pequeña tontería, se les podría proponer, que a costa del bolsillo de los catalanes, y después de consultarlo con ellos, se celebrara si así lo quieren, un plebiscito entre todo el pueblo español y si de común acuerdo, o por mayoría, gana el sí, entonces, podrá el pueblo catalán establecer sus fronteras, lo más ajustadas que puedan hacia el norte, no sea que sin querer, vayan a coger un sólo centímetro de tierras valencianas y entonces se podría armar la marimorena.
Parece imposible que les vaya a entrar en sus pequeños cerebros la realidad, España es una y lo que pueda afectar a una porción de ella, también afecta al resto del país. Pero mucho peor es que quien tiene la obligación de velar por la integridad y la suerte de la Nación, se dedique a oprimir a sus ciudadanos y no sea capaz de cortar de cuajo las malas ideas de quien pretende usar la fuerza, para dividir un país unido con el consentimiento de todos los que hace tan sólo unos años, se dieron la Constitución sin nadie que pretendiera defender otra postura.
Si al cabo del tiempo, nuestra carta magna ha quedado obsoleta, entre todos los gobernantes y el pueblo llano, cambiarán lo que haya dejado de servir y medios tiene el pueblo, para cambiar lo que ya no preste servicio. Mientras tanto, se deberían de dedicar a otras cosas tanto los sediciosos, como los que no son capaces de hacer, que esta triste historia termine por siempre jamás.
¡Camarero!, ¡cerveza para mí, aquí tiene el dinero, gracias!. pepaherrero
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