Hay pena, penita, pena, tener dos hijos tontos, cada día en escena. Y es
que en el reino de Nolt, la cosa no da para más y ni mi hijo el Rajón y mucho
menos el del Ensanche, son capaces de cantar la misma canción, aunque entre
todos los demás, les hagan los coros.
Y aunque el estribillo, sí que lo repiten sin cesar, el resto de la
canción, cada uno, la lleva a su aire...él me ha dicho...yo le dije...y así
pasan los días, y yo desesperando y ellos contestando....quizás,
quizás....quizás.
Luego llegarán las terceras elecciones y después las cuartas y después
las quintas. Ellos chupando del bote y nosotros pagando los trastos rotos. Pero
esto se acaba corazones, a los pobres ciudadanos de Nolt, ya no nos queda, ni
para pagar un réquiem por el muerto y como no vamos a poder pagar ni el bús, va
a ir a votarlos su pad..astro.
Cada día, nos dan en la caja tonta, las fechorías que sin parar van
realizando y que nosotros tenemos que ir pagando, mientras ellos, no saben ni
la sagrada obligación que tienen de pagar la s.s. de su querido ayudante, lo
que si saben, es echarle la culpa al pobre fámulo...pobre lechera.
Esto se está poniendo tan entrado en ascos, que no me apetece ni seguir
haciendo que los pobres que aún me leen, tengan que aguantar mis peroratas, así
que vamos a cortar por lo sano y a desearles a todos, unas felices vacaciones y
que a la vuelta, ya esté todo flamante, en este reino de Nolt.pepaherrero
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