Don Ramón Rodríguez, es ese personaje, que el viento hace llegar, sin saber cómo ni por qué, hasta la puerta de tu vida, sólo para alegrarte haciendote gozar del arte que puede emanar de su lapiz, de su sensibilidad, de su calidad humana. Pero si además,tienes la suerte de que te plasme en su arte, entonces, la ilusión, te puede llevar a la lagrima de emoción y de agradecimiento. En mi caso, Don Ramón, me dedicó un bonito geroglífico. En el, con tres perfectas viñetas, hacía muy facil el adivinar mi nombre. Gracias Don Ramón, por haber sido digna, de su tiempo y su trabajo y aunque sé que no lo merezco, usted, si que merece mi gran estima, como Artista y más como gran persona que es usted. Cuenteme, como su más ferviente admiradora. Por siempre.
Constitución 1812-dueño de Fragua-Rama de bellotas. Gracias
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