HISTORIA TRISTE DEL FIN DE AÑO 2.010

Lo siento, lo siento tanto, que mejor hubiera sido, que el ordenador, se hubiese hecho pedazos, antes de empezar a escribir mi historia.
Esta mañana, hemos encontrado al marido de Eshter, nuestra vecina del -º y al preguntarle como se encontraban, las lagrimas han asomado a sus mejillas de hombre duro y maduro. A su mujer, ayer le pusieron el último tratamiento, antes de someterse a una delicada operación y los ánimos, los tienen por los suelos, porque ella es joven, porque ven nubes en su vida en común y porque hay personas que están sufriendo y darían a gusto su vida, a cambio de la de esa joven llena de amor y esperanza.
Al salir de su sesión de duro tratamiento, Esther ha encontrado a un niño, que sin un sólo pelo en la cabeza, se ha dirigido a ella y con la mejor de sus sonrisas le ha dicho. Hola soy Ximet y soy vecino de tu urbanización, de allí conozco al gorrión del balcón de pepa herrero, a Roco, el perro de Mary-Pili, a Mary-pili, a pepa herrero y a su marido, con los que pensaba hacer un equipo de futbol y ganar a todos los equipos a los que nos enfrentáramos. Pero no pudo ser, me puse malito y he tenido que venir a vivir a este hospital, en el que aparte de los tratamientos, que son muy pesados y desagradables, me lo paso muy bien, con todas las personas que me atienden con todo su cariño y a veces sé que me consienten más de la cuenta. Te los presentaré y verás que gente más agradable y competente. Y si tienes facultades, igual te apuntamos al equipo de tenis que estamos formando. Y tomando a Esther de su manita, la llevó a conocer a todos sus amigos. Durante algún tiempo, la amistad entre vecinos, se fué consolidando.
Los planes de Ximet, en los que siempre entraba su nueva amiga, se hacían cada día más grandes, tenis, futbol, motos... Los equipos, siempre serían los mejores.
Hoy Esther, no ha visto a Ximet, se ha dirigido al pabellón donde el niño se encuentra, pero no hay nadie en su habitación. Cuando se vuelve para marcharse, la madre de Ximet, se dirige hacia ella y con una sonrisa triste en sus labios, le hace entrega, de un sobre escrito con la irregular letra de un niño. "Querida Esther: Hoy he estado hablando con un señor de largas barbas muy simpático, me ha dicho que no me tengo que preocupar por nada, que todo lo arreglarás tú. Saluda a Roco, al Gorrión, a pepa herrero, a su marido y a todos los de tu urbanización y de la mía, a Mary-Pili, le dices que le voy a buscar un novio, que va a ser la envidia del barrio.
Y tu serás la responsable, de que todos los planes que hemos hecho aquí salgan bien, pues para eso somos los mejores. Dentro de muchos años, cuando te acuerdes de mí, piensa que me hubiera gustado ser tu hijo, tanto como me ha gustado ser el hijo de mi madre. Os quiero a las dos, un beso. Ximet
pepa herrero