Al parecer el verano no le sienta bien
a las gentes de Nolt, las noches calurosas y la falta de dinero para poder ir a
la playita, hacen que las gentes se alteren y digan cosas que a veces ofenden a
las personas de bien, luego, llegan los grises y pasan las cosas que pasan.
La otra noche, dos turistas llegados de
lejanas tierras, mientras miraban trozos de la luna reflejando el césped y
cambiando sus tonos verdes, en pequeños suspiros de plata, unos morenos y jóvenes
paisanos, llegados de Dios sabrá el sitio, quisieron vender unas
maravillosamente falsificadas gafas, pero...allí estaban las fuerzas del orden.
Hubieron carreras, se decomisó la mercancía y vimos morenos escondidos tras el
follaje de la noche. Mientras tanto, nuestros más grandes hombres, en aquella
recepción, hicieron planes para mañana por la mañana en el yate.
Allí. Un poco más lejos, pero casi a
vista de pájaro, los taxistas de dos de nuestras mejores ciudades, en vez de
abrazar a una mujer, abrazaban una huelga-manifestación, quejándose de que otros
medios, hicieran su mismo trabajo sin tener que pasar por la caja de la
Hacienda que somos todos y que si no pasamos, de donde van a sacar fondos con
los que dar de comer a nuestros hijos y medicamentos para nuestros abuelos...
En nuestro país, en Nolt, las cosas
están cambiando, nuevas gentes quieren cambiar la Política, yo estoy segura de
que no lo van a conseguir. cuando yo era niña mí querida abuela, me tomaba en
sus brazos y me contaba el cuento de la máquina trituradora que decía así:
Erase una vez, un hombre muy rico y muy sabio, este hombre se compró una gran
máquina trituradora y se empeñó en demostrar que todo en la vida, puede llegar
a ser lo mismo y para demostrarlo, le pedía a las personas, que le dijeran que
era lo mejor que tenían, lo que más apreciaban, o lo que más les molestaba. Las
personas le llevaron cantidad de cosas, todas diferentes entre sí, cuando la
persona, le contaba la historia de aquella cosa, él la metía en la trituradora,
en la que tras unos momentos, se convertía en una pasta, luego hacía lo mismo
con otra cosa...y con otra y con muchas más, las cosas que entraban en la
trituradora, todas se convertían en la misma pasta.
El hombre quiso poner el ejemplo de los
que quisieron ser Políticos y explicó al pueblo, que si todos los Políticos
pasaran por la trituradora, se convertirían en la misma pasta, sólo quedaba una
solución, la solución estaba en que alguien estudiara la forma de conseguir que
el material triturado, fuera capaz de hacer que la pasta tuviera otras
propiedades y consiguiera transformar el producto, en otro producto, del que a
su vez y una vez regenerado, se pudiera obtener la materia que regenerada
pudiera ser empleada para ayudar a vivir al pueblo. Una vez conseguido el
producto, todos vivieron felices y no fue necesario que politiquillos
ignorantes y corruptos dirigieran nunca más al pueblo de Nolt, que a partir de
entonces y sin aforados, ni salva patrias fue felíz para siempre
jamás.pepaherrero
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