BUENAS NOCHES DON ROSENDO

Cumplí con mi compromiso y al marchar dije por todo lo alto, ¡hoy a mí, que no me esperen, me voy p´al mediterráneo! y aún no eran las ocho de la tarde, ya estábamos en el casino. ¡Buenas noches, Don Rosendo, buenas noches Don Carlos, buenas noches Miguel Ángel, son ustedes unos adelantados y a mí, no me gusta ser la última, pero esos fueron los tres besos más queridos de la noche. A Don Rosendo, por partida doble, por ser maestro de los maestros y por ser una persona entrañable, de las que se hacen querer nada más conocerlas, su saludo ha sido ¡no le tenía que decir a Miguel ángel, que no empezara la inauguración hasta que llegara pepaherrero! Gracias, muchas gracias Don Rosendo, pero aunque tenía un compromiso adquirido a las siete y media, he cumplido con él con todo rigor y no ha hecho falta esperarme, cosa que nunca hubiera permitido, pues yo no soy nadie, para que me tengan que esperar y si llego a llegar tarde a algún sitio, será por un motivo muy justificado y por lo que pediré perdón, a quien pudiera corresponder. A Don Carlos Bermejo, lo veo (para mi placer,) casi todos los días y lo malo que tiene el asunto, es que una se acostumbra a que le acaricien la oreja y si falta el “chute” pues eso, que se echa de menos. Y a Miguel Ángel…hay Miguel ángel…cuando yo sea mayor, también quiero ser Miguel Ángel Franco. Este es un hombre, al que por mucho tiempo que pase, siempre le estaré agradecida, ahora hace dos años que tuve la suerte de exponer en el CASINO MEDITERRÁNEO, de la mano del matrimonio Roca Sansano, mi miedo era tanto que el día que fuimos a montar nuestra exposición, pensaba que el señor director del casino, me diría coja usted “eso” y lléveselo a su casa, pero ¡no! Fue tan dulce al hablar, al encomiar mi obra (por supuesto sin merecerlo) y se lo agradecí tanto, que muchas veces le he dicho a mi marido, cuando nos toque la Euromillonaria, todos los días al casino, gracias Miguel Ángel, eres un señor y si el CASINO MEDITERRÁNEO vale mucho, tú también estas a la altura. De nuevo con Don Rosendo y si usted me lo permite, le voy a llevar la contraria, esta noche en el casino, estaba lo mejor de toda la asociación y si alguien ha faltado, seguro que ha sido por importantes quehaceres que los que le hemos podido acompañar, hemos dejado para el día de mañana, pero digo e insisto que he visto a muchas personas de probado valor cultural, estar a su alrededor, arropándole y dándole cariño, como desde estas humildes letras, se lo da, pepaherrero.