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viernes, 29 de octubre de 2010

PUÑO CERRADO...CORAZÓN ABIERTO

Hoy el señor Marcelino, ha pensado que esto, no tiene arreglo y como buen sindicalista, ha dicho !pues ahora al cielo a crear un sindicato! y a sus noventa y dos años, haciendo un hato con los jerséis confeccionados, por su eterna compañera, ha iniciado el viaje, por las blancas cimas de la tierra, hacia las estrellas que desde el cielo, sin conocer de ideas políticas, ni sindicalistas, llaman a quien ha sabido luchar por sus ideales, sean estos, los que sean. Adiós Don Marcelino, aquí nos quedamos personas, que respetamos a las personas y que estamos seguros, que allá donde usted esté, siempre que pueda, tratará de ayudarnos.

Desde aquí, le prometemos, que no seremos reincidentes, que al llegar a una nueva vida, procuraremos luchar por el bien de todos, para que nuestros hijos, se encuentren un mundo mejor que el que les hemos dejado aquí y ahora. Que desde ya, vamos a dejarles una vida digna, un espacio limpio y atractivo, un respeto a los mayores y un amor al estudio y al trabajo.

Adiós Don Marcelino. Cuando usted llegue a su destino, salude a la autoridad y dígale, que nosotros cuando lleguemos, lucharemos por una vida de respeto y de solidaridad para todos...Adiós Don Marcelino...Adiós.
Balfrido Erades

jueves, 14 de octubre de 2010

ALTA VELOCIDAD (MÁS)

Ha llegado hasta Valencia
el tren de alta velocidad
la distancia se ha acortado.
Que pronto se llegará.

Será MÁS larga la vida
y disfrutaremos MÁS.
MÁS podremos ayudar,
a quien MÁS nos necesite.

La muerte, estará MÁS lejos.
Quizás nunca llegará.
MÁS un día al despertar,
dirás ¿para qué me sirve?

Si al tener velocidad,
los pueblos que me he pasado
no los puedo disfrutar.
quizás viajando MÁS despacio,
se pudieran gozar MÁS
pepa herrero

miércoles, 6 de octubre de 2010

DESDE HOY. DESDE AQUÍ

Quisiera saber pintar.
pintar un gran lienzo al óleo
tu cuerpo saber plasmar
cuando pintas aquel hórreo.

hoy quisiera ser la luz
que ilumina aquella sala.
aquella donde expones tú,
tu bosque mi bien amada.

Si yo supiera cantar,
Al cantarte mi balada
Hoy, me podría acercar
Hasta ti mujer soñada.

Cien pintores elegidos
y entre todos, la primera,
Eres para mí, mujer.
Como haces que te quiera.

cuando contemplo tú obra
que haces con tanto amor
y aunque el tiempo no me sobra,
aún creo recordar,
de aquel bosque el rumor.
Balfrido Erades